viernes, 3 de octubre de 2014

Disco del Mes - Septiembre

El Pintor (Interpol)

Por +Ismael Lara @mayatlas
A veces nos gusta ir por la tangente y evitar la línea que nuestros deseos y necesidades quieren mostrar, volviéndola inevitable. Así sucedió en lo personal con el nuevo disco de la banda favorita de una generación. Es cierto que hubo varios discos en septiembre que valen la pena mencionar, desde Aphex Twin a Nortec, y del regreso de Death from Above 1979 hasta la "revelación" de Twin Peaks; sin embargo, el simple gusto de escuchar en tan buena forma a una banda, en la cual la incertidumbre era la etiqueta de su futuro, se vuelve un irremediable placer.

Después de la salida de Carlos Dengler, parecía una misión muy complicada para el resto de la alineación, y que incluso podría decirse que no logra autocompletar una figura tan influyente, pero Daniel, Paul y Sam no se detuvieron en estos detalles y encontraron la manera de volver a hacer un álbum potente, regresando algo de aquella gloriosa época para Interpol. No sorprende entonces que Daniel Kessler haga gala de su extraño virtuosismo, que Sam Fogarino le inserte potente base a esta máquina sonora, y que Paul Banks mantenga lírica y rango vocal en su nivel optimo, pero si cambia cuando el frontman de la banda le agrega una diferente sensibilidad al bajo, un drama muy adecuado para las canciones de El Pintor.

El anagrama de Interpol da título a un compilado de canciones que no aburre en ningún momento, y que están ordenadas de manera que fluya la escucha de principio a fin como pocos discos actualmente. Un gran inicio con el hit All the Rage Back Home y el drama de My Desire, para continuar con canciones que nos recuerdan al acostumbrado estilo de los neoyorquinos, como Anywhere y My Blue Supreme. Ya hacia el final, el disco toma una nueva escalada con algunas de las mejores canciones de los últimos años de la banda, Ancient Ways y Tidal Wave para terminar con un outro lírico-musical llamado Twice as Hard.

Si bien no será el mejor disco de la agrupación, y en algunos momentos parece que su sonido no sale de zonas de comfort, El Pintor tiene la calidad en todas las canciones para mantener vigente la esencia Interpol. Conforme pasan los minutos y las escuchas incrementan las ganas de presenciar estos tracks en vivo.


Hay muchas percepciones distintas sobre las bandas de aquella generación del inicio del milenio en estos años recientes. El Pintor parece que quisiera reclamar un lugar para la banda más compleja en sonido. Solo queda escucharlo y disfrutarlo, el veredicto final ya vendrá con el tiempo.


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